COMIÓ COMO UN OSO
Un oso se sentó en la mesa de un restaurante, presumiblemente esperando a ser atendido. Y además fue con los chicos. | |
Un inmenso oso pardo se metió en un restaurante rumano acompañado de sus dos oseznos. Después de derribar unas cuantas mesas tomó asiento como un cliente más. Su conducta antisocial sembró el terror de la concurrencia. Como la atención requerida nunca llegó, los tres animales se dirigieron a la cocina y se sirvieron por su propia cuenta. "Fue como estar en 'Rizitos de Oro y los tres osos' pero al revés", explicó un comensal. "Y además esta vez querían todo el menú, no sólo la avena". Una vez satisfechos, los tres animales se retiraron del local. Minutos después de la partida se hicieron presentes la policía y autoridades de vida silvestre. Resta decir que ante la falta de servicio a la mesa los osos no dejaron propina. |
0 comentarios:
Publicar un comentario