Las personas privadas de sueño, aunque sea solo por una noche, experimentan períodos de funcionamiento casi normal del cerebro, pero a veces sufren "apagones" o interrupciones de la atención y el procesamiento visual.
(EFE) Así lo afirma un artículo publicado hoy en la revista Journal of Neuroscience, en el que se recoge las conclusiones del estudio, dirigido por Michael Chee de la Universidad Nacional de Singapur.
El informe comprendió la toma de imágenes por resonancia magnética de 24 adultos que efectuaron tareas sencillas que requerían atención visual después del descanso normal, y después de una noche sin sueño.
"La conclusión principal es que el cerebro del individuo privado de sueño funciona normalmente a veces, pero sufre intermitentemente algo parecido a un apagón", comentó Clifford Saper, un experto de la Universidad de Harvard, sin vinculación con el estudio.
Los investigadores mostraron a los participantes grandes letras compuestas por muchas letras pequeñas, y les pidieron que identificaran la letras grandes o las pequeñas y que indicaran sus respuestas apretando un botón.
Las personas que habían descansado bien y los voluntarios privados de sueño mostraron una gama diversa de tiempos de reacción.
Los participantes que dieron las respuestas más rápidas, tanto en el grupo privado de sueño como en el grupo de quienes habían descansado bien, mostraron pautas similares de actividad cerebral.
Pero los participantes descansados o privados de sueño que tuvieron las respuestas más lentas, también llamadas lapsos de atención, mostraron pautas diferentes en su actividad cerebral.
Otros estudios anteriores han mostrado que los lapsos de la atención normalmente inducen la actividad en las regiones frontal y parietal del cerebro, unos "centros de comando" que pueden compensar la pérdida de enfoque mediante un incremento de la atención.
Sin embargo durante los lapsos de atención, Chee y sus colegas encontraron una actividad reducida en estos centros de comando cerebral en las personas privadas de sueño, comparada con la de los voluntarios que habían descansado.
Las personas privadas de sueño, según el artículo, también mostraron una actividad reducida en las regiones del cerebro que participan en el procesamiento visual durante los lapsos de atención.
Dado que el cerebro responde menos al estímulo sensorial durante el sueño, la actividad reducida en estas regiones indica que, durante los lapsos de atención, el cerebro privado de descanso entra en un estado similar al sueño.
Publicadas por Victor a la/s 7:27 a.m.
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