Autorregulación y cuidado de sí mismo
Objetivo: Analizar ampliamente en qué consiste la autorregulación, cuáles son sus principales características, sus consecuencias en caso de que no sea llevada a cabo de manera correcta. Entender la amplia relación que tiene este tema con la psicología, el autoestimo y la auto- motivación. A mi criterio lo más importante es comprender la importancia que tiene creer en uno mismo para desarrollar un cuidado de si mismo creyendo en nosotros mismos para lograr metas y objetivos que quizá parezcan difíciles.
Desarrollo:
Cada uno de nosotros es actor y hacedor de su propia vida ya que de las pequeñas y grandes elecciones depende nuestra existencia, tenemos la capacidad de elegir lo que queremos sentir en cada momento, pero, ¿las elecciones son tan sencillas como parecen?, ¿tenemos la capacidad de darnos cuenta de lo que debemos elegir? Más complejo aún, ¿podemos controlarnos, eligiendo en cada momento nuestros actos, pensamientos y emociones? Quizá la respuesta a estas preguntas parezca sencilla, pero en la práctica es más difícil.
El autocontrol es una capacidad de contener, controlar o regular la propia conducta, está dentro de un conjunto de capacidades para soportar problemas y adversidades, el nombre de dicho conjunto se denomina “fortalezas”. Estas herramientas ayudan al hombre a ser una mejor persona y además a lograr una mayor felicidad. El Autocontrol ha sido mencionado como una herramienta que permite no dejarnos llevar por los sentimientos del momento, saber y poder reconocer que es pasajero en una crisis y que es lo que perdura, sin él estaríamos continuamente actuando irresponsablemente y luego pidiendo perdón por ello.
Desde pequeños nos controlan, haz esto, no hagas aquello, etc. Pero esos son controles y regulaciones externas, si bien es cierto que vamos internalizando ciertas reglas, hay veces que se nos escapan de las manos y no sabemos cómo actuar, no podemos andar por la vida haciendo o dejando de hacer cosas solo porque nuestros padres nos las enseñaron, debemos preocuparnos de quienes somos, que queremos, que esperamos de nosotros mismos, y en base a ello actuar. Al mismo tiempo debemos preocuparnos de los demás, de no perjudicarlos con nuestras elecciones, de hacer valer lo que yo quiero sin dañar al otro.
El interior del ser humano no es algo sencillo, cada persona es distinta, lo que tienen unos no lo tienen los otros, o en una menor medida, y en la inversa. Lo importante y lo valioso es que cada persona pueda conocerse a sí misma y así reconocer cuáles son sus fortalezas y cuáles son sus carencias, y en base a las carencias trabajar, para así ser una mejor persona y ser más feliz y también hacer felices a los demás.
El autocontrol es la capacidad que permite controlar el comportamiento y emociones, no que estas controlen a la persona, obteniendo la posibilidad de elegir lo que se quiere sentir y hacer en cada momento de la vida.
El concepto de autorregulación se basa justamente en la relación compensatoria existente entre lo consciente y lo inconsciente. Este proceso de autorregulación funciona todo el tiempo pero sólo tomamos conciencia de él cuando existe un conflicto o un estancamiento dentro de nuestro proceso de desarrollo psicológico.
Debido a que el ser humano es un ser social existe también una necesidad de adaptación constante al medio, nuestro psiquismo responde no sólo ante estímulos provocados por sensaciones internas, también debe responder a los estímulos provenientes del entorno. Cuando hay una dificultad de adaptación, la energía realiza un proceso de regresión, se va, de lo consiente a lo inconsciente en búsqueda de algún elemento que permita readaptarse y superar la dificultad; esto produce la activación de contenidos inconscientes, ya sea a nivel personal o colectivo, la energía entonces hace el camino de lo inconsciente a lo consciente, progresa llevando estos nuevos recursos, los cuales por lo general aparecen como síntomas neuróticos, con la consecuente sensación de desequilibrio.
La autoestima es el sentimiento valorativo de nuestro ser, de nuestra manera de ser, de quienes somos nosotros, del conjunto de rasgos corporales, mentales y espirituales que configuran nuestra personalidad. Esta se aprende, cambia y la podemos mejorar. Es a partir de los 5-6 años cuando empezamos a formarnos un concepto de cómo nos ven nuestros mayores (padres, maestros), compañeros, amigos, etcétera y las experiencias que vamos adquiriendo.
Según como se encuentre nuestra autoestima, ésta es responsable de muchos fracasos, éxitos y autorregulación , ya que una autoestima adecuada, vinculada a un concepto positivo de mí mismo, dará origen a la capacidad de las personas para desarrollar sus habilidades y aumentará el nivel de seguridad personal, mientras que una autoestima baja enfocará a la persona hacia la derrota y el fracaso.
Publicadas por Owner a la/s 7:53 p.m.
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